Páginas

miércoles, 9 de octubre de 2019

Mi cuerpo no responde como yo quiero. Se tensa y destensa a su total antojo. Mientras yo ando por el mundo como muerta, caminando de aquí para allá sin sentido, sin fuerzas para lograr cualquier propósito. Colapsando. La Tierra, en cambio, gira sin detenerse. Pero yo no tengo tiempo de contar las horas. Necesito concentrarme lo suficiente para poner un pie delante del otro sin caerme. Concentrarme lo suficiente como para recordar que existo, que tengo un nombre y que la mejor meta al final del día, es respirar y desear hacerlo mañana todavía.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu comentario