- Sylvia Plath -
A veces me pasa lo mismo. Yo quisiera escribirlo todo, lo que sucede, lo que pienso, lo que siento, pero el tiempo, los deberes, las cosas, van siempre delante de mí y no puedo seguirles el paso con la agilidad que deseo. La vida se me escurre entre los dedos sin que logre capturar su belleza en plenitud. Pero lo intento, lo vuelvo a intentar, escribo, hundo el lápiz en la carne, me vuelco en el poema, soy el poema. Sólo entonces, la espiral del tiempo retrocede, se detiene, un poquito. Lo suficiente para mirar alrededor y comprender que a menudo, los misterios se develan en el magnetismo, en la magnitud de una sola palabra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario